ANDREAS-SALOME, LOU
La figura de Lou Andreas-Salomé adquirió una notable popularidad tras la publicación, en 1951, de la primera edición alemana de Mirada retrospectiva, que sirvió a Liliana Cavani para hacer su película Más allá del bien y del mal.
La presente edición surge de un segundo manuscrito encontrado posteriormente por Ernst Pfeiffer, amigo personal de Lou Andreas-Salomé, que sin diferir en lo sustancial con el anterior, lo completa y lo hace más preciso.
La importancia de esta autobiografía es que nos aproxima a una de las épocas más atractivas y de mayor creatividad y esplendor de la cultura centroeuropea, teniendo en cuenta que Lou Andreas-Salomé fue amiga y colaboradora de algunos de los intelectuales más representativos de la misma como Nietzsche, Rilke y Freud, entre otros. Además, nos asomamos a una vida sumamente heterodoxa para los patrones convencionales y morales de su tiempo y, en cierto modo, anticipadora del movimiento de liberación de la mujer.
Por último, cabe resaltar la estructura de la obra. Lou Andreas-Salomé no realiza una exposición lineal de sucesos personales, sino que salta continuamente de la anécdota o del hecho al plano de la reflexión más general. Como anuncia el subtítulo, «Compendio de algunos recuerdos de la vida», lo que le interesa no es la descripción secuencial de su existencia, sino la búsqueda de ese sentido más profundo e invisible que realmente constituye el hilo de todo el relato. En el fondo, una manera de ver la vida que, paradójicamente, tiene connotaciones religiosas como queda de manifiesto en el primer capítulo, «La vivencia de Dios».
Mirada retrospectiva viene completada con las «Notas» de Ernst Pfeiffer al final de la obra que aclaran algunos aspectos de la autobiografía como, por ejemplo, la extraña naturaleza de la relación de Lou Andreas-Salomé con su marido, Friedrich Carl Andreas.