AA.VV
Generaciones de niños españoles se han formado de la mano de los libros de la Editorial Calleja, y este era en verdad uno de los propósitos primeros de su fundador, Saturnino Calleja: que los más jóvenes fueran instruidos por sus ediciones.
Sin embargo, la misión de Calleja no acaba ahí, pues se trataba también de que la lectura misma, y la contemplación de las primorosas ilustraciones que contenían sus libros, fuera gozosa y deleitosa.
Este libro analiza el enraizamiento de los cuentos de Calleja en la tradición europea del cuento popular, de transmisión oral en primer lugar, convertido en canon después gracias a figuras tan célebres como los hermanos Grimm, Perrault, Andersen, Bürger, Nesbit o Collodi.
La obra estudia también la recepción de esta tradición en las ediciones de Calleja, esto es, las numerosas versiones, adaptaciones e incluso falsificaciones de que fue objeto para congraciarla con el público español, netamente dirigido por las autoridades civiles y muy en particular por las religiosas.